Las mountain bike de inicio de gama son las bicicletas con los precios más asequibles, están pensadas para un uso normal y suelen ir montadas con componentes a mitad de camino entre calidad y precio.
Las mountain bikes de inicio de gama muchas veces pasan desapercibidas para los ciclistas, ya que no cuentan con el bombardeo de publicitario de las bicis tope de gama. Pero estas no se diferencian tanto, porque cuentan con el mismo cuadro y el mismo sistema de suspensión, aunque algunos fabricantes están variando mínimamente sus cuadros topes de gama, o bien con un pequeño cambio de geometría, diferente carbono o simplemente permitiendo algún ajuste extra, con la idea de tentar al público y que este termine declinándose por ellas.
Vamos a centrarnos en bicicletas de doble suspensión cuyos cuadros son de aluminio, normalmente el material más usado para arrancar las gamas de los catálogos con un rango de precio entre 2000 € y 3000 €, que es la media general para este tipo de bicis, sin embargo, si nos vamos a marcas Top, veremos que sus modelos de inicio empiezan a partir de 4500 € aproximadamente, limitándose a ofrecer su cuadro de carbono montado con componentes más básicos y en ocasiones ofreciendo un material de cuadro un poco menos resistente.
Bicicletas duras
Las bicicletas de inicio de gama son realmente duras, sus cuadros de aluminio son muy resistentes y envejecen mucho mejor que un cuadro de bicicleta de carbono, puedes utilizarlas para montar con tus amigos o para correr alguna marcha ocasional sin ningún tipo de problema. Además, te permite ir mejorándola poco a poco a tu gusto e ir personalizándola según te vayan apareciendo necesidades, que normalmente te llegaran cuando tu forma de montar se vaya potenciando. Es una manera progresiva de ir invirtiendo dinero en la bicicleta a la vez que tu nivel va creciendo, empezaras con una bicicleta base que mejorara contigo y no al revés, empezar con un material superior al nivel del estilo del ciclista como pasa en muchas ocasiones.
Menos mantenimiento
Los componentes que lleva una bicicleta de inicio de gama requieren menos mantenimiento que una tope de gama, ya que están pensados para durar. A esto tienes que añadirle que son más robustos (también más pesados) y más fáciles de regular al ser más sencillos. A nivel amateur esto es algo muy importante, porque ahorrarás mucho dinero en mecánica e iras cogiendo conocimientos del manejo del material progresivamente, porque a ¿quién no le ha pasado comprar un componente que no sabia regular?.
Cuadro suelto
Otra de las posibilidades que ofrecen algunas marcas (no todas) es comprar un cuadro de aluminio de doble suspensión cuyo precio no será tan disparatado como un en material de carbono. Esta opción hay que contemplarla como un proyecto a corto/medio plazo, puedes aprovechar los mejores componentes de tu bicicleta antigua para ahorrarte algo de dinero en el montaje y explorar el mercado de segunda mano para el resto de piezas. Lo bueno de esta opción es que tendrás un cuadro montado a tus necesidades y gusto, el cual te va a durar muchos años.