Un acuerdo al que han llegado Orbea y Canyon con una patente ha dado un giro de guion inesperado y va a terminar mejorando las sendas.
La marca Canyon llevaba un tiempo interesada en la patente “Inside Line” que estaba en poder del fabricante vasco Orbea, una tecnología que permite pasar mejor el cableado interior, ahorrando espacio y haciendo que el cable que bloquea el amortiguador trasero le llegue mucho más directo y recto, haciendo más suave su funcionamiento.
Después de varias conversaciones entre Canyon y Orbea, ambas han llegado a un acuerdo donde el fabricante vasco cede parcialmente su patente, lo que significa que Canyon podrá usar esta tecnología en sus modelos de bicicletas, consiguiendo así mejorar su estética al conseguir unas líneas de diseño finales mucho mas limpias.
El giro de guion que nadie se esperaba es que Orbea vaya a destinar el dinero ganado por esta cesión a su programa “Trail Building'', cuyo objetivo es crear nuevos senderos y mantenerlos para que la comunidad ciclista los encuentre siempre en perfectas condiciones. Siempre hay que agradecer que grandes marcas como Orbea se involucren en la red de senderos, mejorándolos y potenciándolos.