Si te gusta hacer mountain bike y piensas que ya lo has hecho todo sobre una bicicleta, te dejamos unas cuantas sugerencias por si aún te queda algo pendiente por realizar.

El mundo del mountain bike es amplio y nos abre un montón de posibilidades y nuevas experiencias para realizar con la bicicleta, cuando comenzamos a montar descubrimos lo que se siente bajando senderos o lo que hay que sufrir para conseguir la recompensa de la bajada, luego vamos conociendo a buenos amigos que nos acompañaran en nuestras rutas y por último empezaremos a buscar nuevas experiencias que nos vayan convirtiendo en todo un ciclista de montaña.

Montaje de un cuadro MTB

Te acaba de llegar una gran caja y dentro de ella está tu nueva bici con todas las piezas necesarias para su montaje, es como un gran puzzle que deberás de ir montando con ilusión y cariño. Montarte tu propia bicicleta es toda una experiencia, además te aseguras de que todas las piezas estén bien montadas y ajustadas, que todo este engrasado y que la bicicleta funcione fina y correctamente una vez montada. Es una manera de aumentar tu vínculo con la bici, muchos son los ciclistas que se montan y reparan las bicicletas ellos mismos.

Salir a montar de noche

Cuando el Sol cae y deja a oscuras las montañas es un momento mágico para ir a recorrer las sendas que discurren por ellas, como hacer una nocturna en mountain bike será tu nuevo reto, te equiparas con luces para bicicleta y descubrirás que las sendas de noche se ven totalmente diferentes, la sensación de ver solo lo que ilumina el foco hará que tus reflejos mejoren. Las nocturnas son una gran opción para escapar de las altas temperaturas del verano. 

Montar en nieve

Pisar con una bici el manto blanco que cubre los bosques en invierno puede ser toda una experiencia divertida que te dibuja una sonrisa de oreja a oreja, siente como la bici se va de atrás y apura al máximo tu técnica para mantenerte encima de la bici. Aprenderás a deslizarte y a corregir constantemente la dirección de la bicicleta. Para acudir a montar en nieve con la mountain bike, es importante llevar unas buenas zapatillas para ciclismo que sean impermeables y mantengan tus pies secos. 

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 Montar fuera de tu país

Coger un avión, hacer un viaje en furgoneta que te lleva más allá de las fronteras del país, un tren o un barco. Que la mountain bike ruede por senderos internacionales te va a enriquecer como ciclista de montaña y te dará la oportunidad de conocer a otros ciclistas que como tú comparten la pasión por las bicis en diferentes países. A todo esto deberás de sumarle que tu estilo y técnica mejorara al montar en diferentes tipos de terreno. No hay nada como un viaje en bicicleta.

Dormir al lado de tu bici

¿Nunca has dormido pegado a tu bici? ¿Despertarte y ser lo primero que ves?, nada como hacer una ruta de varios días con ella y llegar cansado por la noche y acostarse al lado de ella para recuperar fuerzas para seguir pedaleando con ella al día siguiente. Un viaje por etapas con la bicicleta despertará todos tus sentidos. 

Buscar nuevas sendas.

Sobran las razones para explorar un sendero nuevo, la exploración es parte del mountain bike. Adentrarse en unas montañas que no conoces para buscar un nuevo sendero o tal vez salirte de tus rutas habituales y darte cuenta de una nueva senda que estaba ahí al lado y había pasado siempre desapercibida.

Conquistar el pico de una montaña haciendo ciclomontañismo

¿Subir a 1950 m de altitud con tu bici? ¿Por qué no? Algunos lo llaman ciclomontañismo, pero solo es otra parte más del mountain bike, el superarse a uno mismo intentando coronar ese pico en el que tal vez tengas que cargar tu bici durante horas para llegar a él, pero no importa porque una vez lo consigas habrás mejorado como rider y la montaña te recompensará con una épica bajada.

Correr una carrera

La prueba de fuego de todo aquel que se considere un mountain biker es correr una carrera, no importa que sea de enduro, dh, avalanche o rally, lo importante es todo lo que conlleva estar en ella, ponerte un planning de entrenamiento, constancia en los entrenamientos, preparar tu bici, organizar el viaje para llegar a la carrera, etc. Todas estas experiencias mejoran la unión con tu bici y harán que ames aún más el mountain bike.

 Ir a un Bike Park

Esta puede ser una de las experiencias más divertidas encima de una bici, reunir a todos los colegas y desplazarte hasta un bike park será toda una gran experiencia. Descubrirás lo rápido que los telesillas te dejan en la cima de la montaña para descender bajadas realmente largas que te dejaran a pie de telesilla, un bucle infinito que si no estas acostumbrado te dejara lleno de agujetas para el día siguiente. 

 Montar junto al mar

Nosotros somos de montaña, ¿pero qué pasa cuando juntas la montaña con el mar?. Esas sendas y caminos que van junto al mar que serpentean por los acantilados, trialeras en donde vas bajando y no pierdes de vista nunca el mar, puede que en este tipo de rutas tu sensación de libertad sea aún mayor.