El reconocido rider y especialista en descenso (DH) y freeride, Lewis Buchanan, estuvo al borde de la muerte tras un accidente en un acantilado mientras intentaba realizar un drop extremadamente técnico. El salto, que presentaba una salida complicada y un aterrizaje corto, estrecho y peligrosamente cerca de un precipicio, requería una gran velocidad para ser superado, lo que hacía casi imposible frenar a tiempo al tocar el suelo. A pesar del fuerte viento y la evidente dificultad del salto, Lewis decidió intentarlo después de analizar cuidadosamente la situación.
La tragedia ocurrió cuando, al aterrizar, Lewis no pudo detener la bicicleta y perdió el control, dirigiéndose directamente hacia una caída al vacío. Afortunadamente, sus dos compañeros de equipo actuaron con rapidez y uno de ellos usó su propio cuerpo para frenar a Lewis, evitando lo que podría haber sido una caída mortal.
Este incidente pone de relieve la importancia de reflexionar sobre los riesgos involucrados en el freeride y el downhill extremo. A veces, el deseo de superar un desafío puede nublar el juicio, pero es crucial recordar que el verdadero logro es mantenerse vivo para disfrutar del próximo sendero. Como abordamosen este artículo, hay momentos en los que es mejor no arriesgarse innecesariamente.