Los innovadores chicos de The Q desafían constantemente los límites de la creatividad en la fabricación de bicicletas fuera de lo común. Su última obra es una bicicleta capaz de plegarse sobre sí misma de manera increíble, permitiendo que sea almacenada en lugares estrechos como armarios o que se cande ella misma al plegarse sobre una farola. Gracias a un ingenioso sistema de cables conectados a una carraca, la estructura recupera su rigidez para ofrecer una experiencia de pedaleo sin contratiempos.