Shimano sigue patentando innovaciones que tal vez veamos en el futuro del MTB. Lo último es un freno que cuenta con seis pistones, pero lo que más llama la atención es que va anclado directamente al eje trasero.
El nuevo sistema de montaje de Shimano elimina la necesidad de fijaciones específicas en las vainas del cuadro, lo que reduce la complejidad estructural y los refuerzos necesarios en cuadros de carbono, disminuyendo así el peso del cuadro. En su lugar, el adaptador se fija a la parte inferior de la bicicleta mediante el eje trasero. Sin embargo, para que este sistema funcione correctamente, el adaptador también necesita ser fijado al cuadro con un tornillo, lo que garantiza la estabilidad necesaria.
Un punto clave es que este adaptador facilita la centración del rotor en relación con el caliper, lo que debería mejorar el desgaste uniforme de las pastillas de freno. Además, el adaptador puede ser parte integral del caliper; según las fotos, Trek tiene algo parecido en su modelo Supercaliber.
Sistema de la Trek Supercaliber.