El mundo del MTB no gana para disgustos. Tras meses de rumores y un sector ciclista que parece un ring de boxeo con marcas cayendo por KO, ahora le toca el turno a 7Anna, la empresa polaca dueña de la marca NS Bikes, Rondo, Octane One y Creme Cycles.

El 18 de agosto, la compañía presentó oficialmente una solicitud de quiebra. Pero ojo: eso no significa que vayan a apagar la luz y cerrar el chiringuito. Es un movimiento legal para ganar tiempo, protegerse de los acreedores y buscar un respiro mientras intentan reorganizarse o buscar nuevos inversores para poder continuar en el mercado. Realmente esta situación no ha sido de repente ya que llevan varios años encadenando un montón de desdichas económicas, desde ataques hackers a sus sistemas, cierre de sus proveedores principales en Europa e incluso bancos cerrándoles el grifo en plena temporada.
El mensaje oficial de la compañía: “seguimos en la lucha”
A pesar del drama, desde 7Anna han lanzado un comunicado con un mensaje claro: no es el final. Las marcas siguen vivas, las bicis se siguen vendiendo, las garantías siguen activas y hasta prometen lanzar nuevos modelos en breve. Palabras de Szymon Kobyliński, que firma el comunicado con un “no nos rendimos” de manual.
La jugada ahora pasa por conseguir inversores que quieran apostar por unas marcas que, pese a todo, tienen mucho nombre en el MTB, el gravel y las bicis urbanas.
¿Qué significa esto para los riders?
De momento, nada cambia. Si tienes una NS en el garaje, puedes respirar tranquilo: el servicio técnico sigue activo y no te van a dejar tirado. Pero está claro que el futuro depende de que alguien ponga pasta y confianza en la compañía. Lo que sí queda claro es que la noticia vuelve a poner sobre la mesa lo mal que está el sector ciclista: entre cierres, fusiones y marcas entrando en bancarrota, el panorama parece más una final de descenso bajo tormenta que un mercado estable.