Cuando pensábamos que el desviador delantero no volvería a las bicicletas la empresa automovilística Ford acaba de patentar un evolucionado desviador antes nunca visto electrónico.
Esta nueva patente ha sido descubierta por la página Wheelbased y podemos observar que no se parece a ningún desviador antes visto, ya que no se ven cables que lo muevan o pequeñas bieletas que lo activen. Antes de echarle un vistazo hay que tener en cuenta que la industria del automóvil ha entendido que los coches en los centros de las ciudades tiene los días contados, por lo consiguiente han puesto a sus escuderías a trabajar en bicicletas eléctricas y tecnología para estas, por lo que veremos a corto plazo una guerra comercial entre el sector automovilístico y el sector de la bicicleta por llevarse el trozo del pastel de la movilidad urbana.
El nuevo desviador de Ford se mueve gracias a dos cables de Nitinol, que es un material que sale de la mezcla entre titanio y níquel, estos cambian de forma cuando se les aplica calor a través de una corriente eléctrica, este cambio mueve el desviador y desplaza la cadena de un plato a otro.
Uno de los cables mantiene la cadena en el plato interior y el otro en el plato exterior, al aplicarle corriente a uno de ellos cambia de forma y desplaza la cadena para un lado u otro. La idea de Ford es crear un dispositivo económico de producir a gran escala, barato para no disparar los precios de las bicicletas finales y fácil de mantener para el usuario.