El mountain bike moderno ha evolucionado con una infinidad de componentes y avances tecnológicos que han hecho que este deporte sea más accesible para muchas personas, pero todo esto no es suficiente para practicarlo con seguridad.
Sin embargo, es crucial recordar que sigue siendo un deporte extremo, que requiere un mínimo de habilidades físicas, resistencia y conocimientos técnicos. No basta con tener la mejor bicicleta o el equipo más avanzado; si el ciclista no está preparado física y mentalmente, no podrá disfrutar plenamente de la experiencia.
1. La Comodidad Absoluta No Existe
En el mundo del mountain bike, hay una nueva generación de ciclistas que nunca parecen estar satisfechos con sus componentes. Se quejan de que todos los sillines son incómodos, que ningún puño les convence, o que ningún casco es lo suficientemente adecuado. Pero, la realidad es que el cuerpo humano necesita tiempo para adaptarse y fortalecerse. No puedes esperar sentirte completamente cómodo desde el primer día; es un proceso que requiere paciencia, entrenamiento y perseverancia. Andar en bicicleta no es un paseo en un coche de lujo; es un deporte que demanda esfuerzo, y en lugar de buscar comodidad, deberías enfocarte en el disfrute, el reto y la superación personal.
2. La Bicicleta No es el Problema, el Problema Eres Tú
Cuando alguien compra unos esquís y se dirige a una estación de esquí, lo primero que hace es contratar a un monitor para aprender a esquiar. Entonces, ¿por qué no hacemos lo mismo cuando compramos una bicicleta? Gastarse miles de euros en una mountain bike para luego no saber cómo utilizarla es un desperdicio. En lugar de frustrarte y pensar que necesitas una bicicleta mejor, considera la posibilidad de tomar cursos con profesionales que te enseñen a controlar tu bicicleta y mejorar tu técnica. Reconocer que el problema eres tú y no tu bicicleta te ahorrará mucho dinero en actualizaciones innecesarias.
3. Deja de "Cagarte"
En el mundo del mountain bike, hay una nueva horda de ciclistas que se autodenominan "finishers" o "racers", que invierten una cantidad considerable de dinero en equipamiento y entrenamiento. Sin embargo, muchos de ellos se ven arruinados en el día de la carrera por un mal gel energético o una comida inadecuada que les provoca problemas estomacales. Si quieres evitar ser uno de ellos, debes fortalecer tu estómago. Una manera de hacerlo es entrenar después de comer, cuando tu estómago aún está lleno, e ir introduciendo gradualmente bebidas isotónicas, geles o barritas energéticas durante tus salidas. Así, tu cuerpo se acostumbrará a estos productos y evitarás sorpresas desagradables en el momento clave.
4. Si Tienes Miedo, Vete
El mountain bike es un deporte extremo, lo que significa que te enfrentarás a situaciones de riesgo que pondrán a prueba tu control del miedo. Este no es un deporte para los débiles de corazón. Si te gusta la bicicleta y la montaña, pero no te sientes cómodo en situaciones peligrosas, quizás el Gravel Bike sea una opción más adecuada para ti. Sin embargo, si estás dispuesto a enfrentar tus miedos, puedes ir expandiendo tu zona de confort enfrentándote a obstáculos técnicos que estén ligeramente por encima de tu nivel actual. Con el tiempo, tu miedo disminuirá, aunque nunca desaparecerá por completo, incluso cuando te conviertas en un ciclista experto.
5. Ponte en Forma o Muere
No importa si tienes una bicicleta eléctrica o una mountain bike de alta gama; si no tienes una forma física mínima, nunca podrás disfrutar plenamente del mountain bike. Gastar dinero en una nueva horquilla no solucionará el dolor en tus brazos si eres débil muscularmente. Es crucial dedicar tiempo a fortalecer tu "core" y entrenar fuera de la bicicleta, ya sea en el gimnasio o con ejercicios en casa que utilicen tu propio peso corporal. Si no te pones en forma, te convertirás en un simple pasajero en tu bicicleta, descendiendo por inercia mientras te aferras al manillar para sobrevivir.
En resumen, el mountain bike es un deporte que requiere dedicación, esfuerzo y una mentalidad fuerte. Siguiendo estos consejos, estarás en camino de dejar de ser un flojo y convertirte en un verdadero ciclista de montaña.