El mountain bike además de ponernos en forma y darnos momentos de máxima diversión también puede hacernos parecer más sexy frente a otras personas.
Ser sexy a pesar de lo que muchos piensan no tiene nada que ver con tener un gran físico, una persona aventurera, independiente y segura de si misma puede ser tremendamente sexy. Dentro de las muchas cualidades y cosas buenas que nos aporta el mountain bike podemos agregar también que nos da un toque más sexy a todos los que lo practicamos y estas son solo algunas de las razones.
Hacer MTB te da confianza en ti mismo
Hay personas que un día no funciona el ascensor y se les cae el mundo encima, sin embargo los ciclistas de montaña hemos visto como nos pillaba la noche sin luces en mitad de la montaña o hemos sufrido una avería en mitad de la nada que nos ha dejado tirados y de ambas situaciones hemos salidos airosos El mountain bike aumenta la confianza en nosotros mismos y nos hace ser más seguros y esto, nos hace terriblemente sexys.
Hacer MTB te hace más feliz
Somos todo lo contrario a una persona amargada que necesite tomar pastillas para sentirse bien. El mountain bike es un gran psicólogo que nos dibuja una sonrisa nada más sentir el manillar en nuestras manos. Una simple vuelta por una senda cercana nos hace felices y vivimos cada salida como si fuera una aventura impresionante, y los aventureros felices son muy sexys.
Hacer MTB te mantiene en forma
Hay gente que se desplaza en coche a un Gym para luego pedalear en una bici que no se mueve, en cambio los ciclistas de montaña nos mantenemos en forma a base de subir cuestas y de recibir impactos en nuestros brazos en los descensos. Estar en buena forma física y sin flacidez es muy sexy, ademas que nos asegura una vejez con una salud aceptable.
Hacer MTB te hace conocer a ti mismo
Encontrarse a uno mismo es más fácil cuando estás sentado en una roca de un barranco por donde no pasa ni el tato y te quedas embobado mirando al infinito. La mountain bike es un vehículo que nos puede hacer llegar a sitios inaccesibles donde el silencio y el aislamiento hará que nos conozcamos a nosotros mismos y sepamos muy bien lo que queremos, la seguridad de saber lo que se quiere en esta vida es muy sexy.
Hacer MTB te abre la mente y nos enseña mundo
Una persona que hace mountain bike y viaja por el mundo ha conocido muchos sitios y se ha parado en el camino a hablar con las personas del lugar, en todo este tiempo habrá perdido sus prejuicios y su miedo a los cambios y a lo desconocido, una mente abierta y con ganas de descubrir cosas nuevas, es más sexy que un cuerpo bonito. Los ciclistas de montaña suelen moverse por lugares donde los pueblos tranquilos son la tonica y donde es muy fácil empaparse de la cultura del lugar.
Hacer MTB te hace mejor persona
Cuando eres un verdadero ciclista de montaña siempre acabarás ayudando a otras personas que te encuentres por el camino, echarás una mano para cambiar un pinchazo, ayudaras con una indicación a alguien perdido u ofrecerás un mordisco de tu última barrita a un compañero agotado. Las buenas personas son las que cambian el mundo y cambian el mundo es sexy.
Hacer MTB te hace ser apasionado.
Los ciclistas de montaña somos apasionados, en cualquier debate sobre bicicletas nos volvemos locos, no somos capaces de hacer una ruta porque sí, disfrutamos de cada subida y de cada metro de bajada. Pensamos que no hace falta recordar que ser apasionado es muy sexy.