Salir a montar con la bicicleta por la nieve es algo muy tentador durante el invierno, pero a la hora de rodar por esos paisajes nevados hay que tener cierta prudencia. 

Una de las experiencias que nos propone el invierno es deslizarnos con nuestra bicicleta por sendas o laderas llenas de nieve, algo totalmente nuevo para algunos ciclistas novatos que por falta de experiencia pueden convertir algo divertido en toda una pesadilla. 

Previsión meteorológica y alertas 

Antes de acudir a la montaña montar en bicicleta por la nieve, es muy primordial estudiar la previsión meteorológica y observar si hay alguna alerta vigente en la zona donde vamos a ir. Revisar también los seguros de montaña, ya que algunos no cubren gastos de accidentes si estos suceden en alertas naranjas o rojas por considerarlos imprudencias. Si las previsiones no son buenas, es mejor no ir, a quedarse atrapado en la montaña, hay muchos días de invierno para salir. 

Ropa

Recuerda que la nieve es agua helada, con lo cual tienes que vestir totalmente impermeable desde los pies hasta la cabeza. Presta atención especial a no pasar frío en los pies y en las manos, vístete con ropa técnica de ciclismo y de calidad para disfrutar del paisaje y la ruta. Vístete con la teoría de capas, con una primera capa térmica que te aporte calor y una última capa impermeable que te proteja del agua y el viento. 

No abandones los caminos

En un paisaje totalmente nevado es muy fácil perderse, no abandones los senderos ni los caminos en ningún momento. Es muy tentador tirarse por una ladera de nieve en polvo, pero esto puede ocasionar que perdamos la orientación y no sepamos volver al punto de inicio.

 Hielo y cubiertas

Las cubiertas con clavos son la mejor opción para rodar por la nieve, ya que estas nos mantendrán con buen grip en todo momento y evitará que caigamos cuando pisemos placas de hielo en el camino. En caso de no tener este tipo de cubiertas, puedes fabricarte unas caseras, utilizando varias bridas puestas alrededor de la cubierta, otro truco es bajarle la presión a los neumáticos para que ganen superficie de apoyo. Recuerda que un neumático mtb con tacos espaciados  y grandes, ayudaran a que claven bien en la superficie blanca. 

Comida y agua 

Con el frío vamos a quemar más calorías de lo habitual, ya que el cuerpo usará energía extra para mantenerse caliente. No te olvides de alimentarte y beber agua aunque haya frío, esto mantendrá tu ánimo elevado y tendrás energía de sobra para disfrutar de las sendas. 

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Obstáculos

Recuerda que debajo de la capa de nieve se pueden esconder piedras, troncos y agujeros que no vas a ver, otra razón más de peso para no abandonar los caminos y así evitar una caída poco agradable al colisionar contra un objeto enterrado en la nieve.

Sigue las rodadas

En el caso de que no seas el primero en pasar por el camino nevado, seguir las rodadas que hayan abierto te van a ayudar a avanzar mucho más fácil y deprisa. Mantén la bicicleta dentro de la rodada y síguela hasta que esta se acabe.