Cuando salimos a montar en mountain bike activamos todo nuestro cuerpo, la sangre bombea nuestros músculos y aumentamos nuestra frecuencia cardíaca, al acabar nuestra actividad es importante volver a nuestro cuerpo a la calma.
La adrenalina de las bajadas, la fuerza que realizamos para superar las subidas o los piques sanos que hacemos con los amigos activan al 100% nuestro cuerpo, tensado los músculos y oxigenando nuestros pulmones. Una sensación que nos hace sentir geniales y nos ayuda a liberar las tensiones acumuladas a lo largo del día. Pero una vez acabado el entrenamiento es aconsejable revertir todo el proceso de tal manera que poco a poco regresemos a la calma y desactivemos nuestro cuerpo.
Rueda suave
Cuando ya estamos finalizando la ruta aprovecha los últimos kilómetros para rodar suave, baja la intensidad del pedaleo , comenzaremos a volver a la calma disminuyendo la cadencia para que nuestra frecuencia cardíaca vuelva de nuevo a su estado habitual. Al bajar el ritmo de pedaleo conseguiremos que la sangre circule mas suave por los músculos y estos empiecen a relajarse. Esta fase de relajación la puedes aplicar o bien en los últimos 5 kilómetros de la ruta.
Estiramientos
Si la salida que has hecho ha sido muy intensa, nada más llegar no te pongas a estirar, deja reposar tus músculos un tiempo y mas tarde con pre-calentamiento de 2 minutos,haz una sesión de estiramiento de media hora . El tono muscular, la actividad del sistema nervioso central y otros factores hacen que estirar nada mas terminar después de una sesión muy intensa en bicicleta no sea aconsejable. En cambio si la salida ha sido más bien moderada puedes estirar nada más llegar aprovechando que los músculos están aún calientes, pero no llegan a estar tan fatigados como en una salida mas intensa.
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Movilidad
Haz ejercicios de movilidad una vez llegues a casa antes de ducharte, la parte superior del cuerpo tiende a ponerse rígida cuando montamos en bicicleta y si no la soltamos podremos acabar con dolores provocados por la tensión acumulada o con perdida de flexibilidad. Puedes hacer ejercicios de rotación de hombros,de cadera, estiramiento de cuello, etc.. todos estos ejercicios muy despacio y acompañados de respiraciones profundas. No te olvides de estirar la espalda y lumbares, tumbándote en el suelo llevándote las rodillas al pecho y girando las piernas hacia un lado. Un rodillo Foam es un accesorio muy practico para mitigar la rigidez muscular.
Ducha
Nada como una buena ducha una vez que tenemos nuestro cuerpo totalmente en estado de calma, en la ducha podemos terminar por relajar a los músculos con una "Ducha de contraste" usando agua caliente y fría sobre los músculos. Usa la norma 15/15, es decir 15 segundos de agua caliente y otros 15 segundos de agua fría, repite este proceso entre 8 y 12 veces. Cuando lo hagas puedes enfocar la ducha en las zonas mas doloridas y acaba la sesión siempre con agua fría.
