Shimano, el renombrado fabricante de piezas para bicicletas a nivel mundial, se ha convertido en el blanco de un significativo ciberataque perpetrado por el grupo de ransomware más destacado del mundo, LockBit.
LockBit ha añadido a Shimano a su lista de víctimas, afirmando haber sustraído cerca de 4,5 terabytes de datos sensibles que afectan tanto a clientes como a empleados. La filtración de datos incluye información como direcciones residenciales, números de teléfono, extractos bancarios, documentos financieros, documentos confidenciales y contratos, por mencionar solo algunos ejemplos.
Este grupo de hackers ha establecido un plazo hasta el 5 de noviembre para que Shimano pague el rescate, pero al parecer, la empresa ha optado por no ceder a las demandas, lo que ha llevado a LockBit a hacer públicos los datos de la compañí, pero ha día de hoy aun no se ha publicado ningun dato, por lo que hace sospechar que haya algún tipo de negociación entre los ciberdelincuentes y la marca nipona.
Shimano no ha emitido un comunicado oficial sobre la filtración. En respuesta a las indagaciones de los medios de comunicación como cyberdaily., la empresa ha declarado: "Este asunto concierne exclusivamente a Shimano, por lo que no podemos realizar comentarios en este momento."
LockBit es conocido como uno de los grupos de hackers más activos, especialmente dirigido a grandes compañías, a las cuales luego les exige un rescate a cambio de la información robada. En este caso, el secuestro de datos de Shimano plantea interrogantes sobre la posible divulgación de información confidencial. Entre esta, podrían incluirse adelantos de futuros lanzamientos que normalmente las empresas relacionadas con el ciclismo guardan en secreto hasta tres temporadas por delante.