Hacer regalos tiene el riesgo de que no gusten y que estos sean devueltos. Esto fue lo que paso con una persona que regaló una bicicleta normal.
El día de Navidad el árbol se llena de regalos y uno de ellos era una bicicleta tope de gama para disfrutar al máximo del mountain bike. Cuando el ciclista abrió su regalo se emocionó bastante y salió a probarla por la calle rápidamente.
Cuando dio las primeras pedaleadas se dio cuenta de que pasaba algo raro y que la bicicleta no avanzaba con la velocidad que él esperaba, fue cuando observó que esta no tenía motor y que no era una bicicleta eléctrica. Lo que le decepcionó bastante como para pedir el ticket de compra y así poder devolverla.
“Si una bicicleta no tiene motor no dibuja sonrisas y no puede ser divertida“ dijo el ciclista algo decepcionado mientras caminaba hacia la tienda de bicicletas para cambiarla por una flamante ebike que si le iba hacer feliz. Cuidado estas fechas cuando regaléis regalos por que en muchas ocasiones no se acierta.