La DGT acaba de anunciar que pondrá a sus agentes a controlar el paso de ciclistas de montaña por las sendas estas navidades para evitar accidentes provocados por el alcohol.
Una de las tradiciones ciclistas en navidad es la de llevarse una botella de Mistela o Champagne a lo alto de una cima para despedir el año o simplemente para celebrar la navidad. La tradición consiste en comerse unos polvorones regados con dichas bebidas justamente antes de iniciar el descenso.
Foto: Guardia civil
Por este motivo la Guardia Civil montará controles de Alcoholemia entre los arbustos justo al final de las sendas de descenso más populares entre los ciclistas de montaña, donde parará aleatoriamente a ciclistas y les hará soplar para saber si conducen bajo los efectos del alcohol.
La DGT también informa que durante estos días de cenas de empresa pondrá dispositivos de control por las sendas locales “Por si hay algún listo que ha pensado regresar a casa todo borracho circulando por sendas con su bicicleta de montaña y así evitar ser multado” apuntilla el director de tráfico. Si bebes, no pedalees.